jueves, 15 de marzo de 2007

...Y sombras





No todo van a ser aciertos ni flores, así que me pondré mi disfraz de Pancartero (pero el de los que ladran el rencor por las esquinas, no el de "sábado, sabadete, de mani con Marienete") y le meteré caña al Gobierno de Zapatero.




Vivienda: Es uno de los problemas reales de los españoles (de Juana, de Pedro, de Carlos...). A mi modo de ver, y en relación con la actuación del Gobierno, el principal problema ha sido las expectativas levantadas con la creación del Ministerio de la Vivienda y la casi falta de competencias que tiene para poder dar una solución a la situación de desigualdad de oportunidades y de exclusión que genera el mercado. Si a eso le añadimos una Sociedad Pública de Alquiler con bastante más oscurantismo que oferta de viviendas y que algunas muy buenas ideas se quedaron en el tintero por falta de valentía de la Ministra ante las críticas, la valoración no puede ser buena. A ver si con la futura Ley del Suelo se mejora en lo que queda de legislatura.


Salarios: Durante estos años ha aparecido la llamada generación de los mileuristas (aunque ya quisieran muchos llegar a esas cifras), concepto que va más allá de la cantidad recibida por un trabajo sino que implica la imposibilidad real de acceder a una autonomía económica plena por una parte muy importante de la población. Tanto en periodos de bonanza económica (como el actual) como en los de recesión (por descontado), siempre se menciona la moderación salarial. Además, positivamente se ha subido el SMI, pero el objetivo de 600 €/mes es demasiado moderado. Los jóvenes corearon el el 14-M el "No nos falles"; pues eso: no nos falles.

Ley del tabaco: Lo que prometía ser otra ley novedosa, se quedó a medio camino. En los trabajos no se fuma, pero son muy pocos los establecimientos hosteleros que se han acogido a la opción de no fumar y que poco control está habiendo. Vergonzosa es la impunidad de bares nocturnos y discotecas que incumplen radicalmente la ley (todos, desde luego, mayores de 100 metros cuadrados). ¿Para cuándo una ley como la italiana?.


Ley de Prevención de bebidas alcohólicas en menores: Otra Ley del Ministerio de Sanidad que también empezó siendo tibia por ejemplo en la regulación de la publicidad y que al final ni vió la luz. Las presiones políticas y empresariales hicieron que fuera la primera norma del ejecutivo en paralizarse, demostrando una falta de valentía en cuestiones esenciales como es la salud pública.


Ley de la Memoria Histórica: Más tibieza al asunto. Una ley que debiera suponer una reparación total a las víctimas del franquismo descafinada en el anteproyecto principalmente por no anular las sentencias condenatorias de los juicios sumarísimos durante la guerra y que además, no hace más que posponerse su tramitación parlamentaria.


Reforma de la Constitución (y del Senado, por ende): Otro de los compromisos electorales de Zapatero, y previstos para el último año de la legislatura así que es ventajista escribirlo ahora. Sin embargo, si consigue alcanzar un acuerdo con el PP para realizar ésto (o para cualquier otra cosa), empezaré a creer en los milagros, es decir, empezaré a oir la COPE, es decir, me haré de FJL, es decir, tendré plan para salir por toda la geografía española todos los sábados, es decir, que no..., que mejor que ni lo intente. Eso, y que la Real va a ganar la liga.


Acuerdos con la Iglesia Católica: Si el objetivo era que a partir de 1987 la Iglesia se autofinanciase, se ha perpetuado que sea el Estado el que mantenga la institución y no sus fieles.
De todo lo que recauda hacienda con nuestros impuestos, porque un señor se declare católico, nos van a quitar un 0,7 del dinero destinado a sufragar todos los servicios e inversiones del país para que una institución que a través de sus representantes y medios de difusión está crando un clima de convivencia insostenible.


Gestión de la cuestión del Estatut: No dudo que el resultado alcanzado sea positivo para avanzar en la construcción del Estado de las autonomías, pero la gestión de todo el proceso de reforma ha sido un camino bastante disparatado que provocó, entre otras cosas, la disolución del anterior gobierno catalán y que golpeó duramente Rodríguez Zapatero.


Cuestión del Sáhara: La visita de Zapatero a Marruecos la semana pasada ha significado un paso atrás en la postura española ante la situación del pueblo saharaoui. Que las relaciones con Marruecos sean un tema clave dentro de la politica internacional del Gobierno no debe ser óbice para que éste defienda el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas y el referéndum de autodeterminación del Sáhara y no el plan de autonomía que propone Marruecos.

4 comentarios:

Raúl Pleguezuelo dijo...

De acuerdo en todos los puntos en los que el gobierno se ha quedado corto, espero que se vayan acometiendo poco a poco, pero la verdad es que en tres años, gobernando con mayoría simple y con la oposición montando pollos con temas sensiblemente peligrosos, es todo un logro lo que ha llagado a acometer este gobierno.
Pero es bueno sacar los temas pendientes para que no se queden en el baúl de los recuerdos.

Saludos.

F. de los Ríos dijo...

Enhorabuena. Es espectacular ...

Anónimo dijo...

y el estatuto de aragón? se te ha olvidado entre las sombras. discriminar como se ha hecho a nuestra tierra con este estatuto es grave, sobre todoen dos cuestiones: agua e inversiones, sin olvidar lenguas, competencias, identidad...

Guillermo dijo...

El Estatuto de Aragón sólo ha tenido un voto en contra en el trámite del Congreso (aún quedan las posibles modificaciones en el Senado).

Seguro que se queda corto en muchos aspectos, como el catalán o cualquier otro, pero en las normas más importantes me parece fundamental que puedan ser aceptadas por todos (seguro que todo lo escrito lo compartes), y hay posiciones como las que defiende CHA, que muchos no comparten y no pueden formar parte de una norma elemental y para todos.

Ahora, que no estén en el Estatuto, no significa que no puedan desarrollarse o que para un futuro se pueda hacer la pedagogía política para que estén incorporadas.